COTIDIANIDADES

.- Insensibilidad gubernamental con la cuarta ola de Covid

Por: SAUL HERNANDEZ

ESTA CUARTA ola de Covid que se está registrando está siendo aún más alta que la anterior y ya analistas señalan que podría equipararse a la de los inicios del 2021, aunque la variante es el hecho de que es más contagiosa, pero a final de cuentas no tan letal, señalan.

Lo cierto es que de acuerdo a los número arrojados por la Secretaría de Salud, en tan solo dos días se rebasaron los 70 mil casos infecciosos y el volátil sistema hospitalario empieza a hacer agua, donde ya se observa que las pruebas para detectarlo son insuficientes.

Lo peor del asunto es que las mismas autoridades ya se vieron rebasadas, al grado tal que ante la falta de equipamiento han salido a señalar algunas situaciones tales como si tienen los primeros efectos ya determinados mejor que se atiendan y no esperen a las pruebas, pero qué pasa cuando asisten al médico, éstos les piden las pruebas para determinar su tratamiento, es decir, resulta lo mismo.

Para nadie es ajeno el problema y con ello las consabidas enfermedades de gripe y de influenza, que aunado al coronavirus las cosas se complican porque la población no atina a saber a final de cuentas qué es, por ello la preocupación sube de tono, sin que la autoridad haga algo al respecto.

Y nuevamente se hace la observación de la inoperancia que están teniendo los gobiernos en sus tres niveles porque no se hace más para poder enfrentar le problema, con todo ello, aunado a la economía entonces la situación se vuelve a agravar y pareciera que seguimos hundidos en un círculo vicioso, donde se llega a la conclusión de atenderse en materia de salud o  de comer, principalmente en lo que se refiere a la familia.

Lo anterior sin olvidar otras actividades que representan un riesgo y, por supuesto, un gasto, como lo es el ir a las escuelas, donde para sostener la actividad hay qu hacer el gasto en el uso personal de los protocolos de salud, tan sólo para citar alguno, pero de que nuevamente se empiecen a tomar cartas en el asunto, sin duda es urgente.

Y debido a tal insensibilidad gubernamental y falta de poder de convocatoria social, al parecer ésta nuevamente se encuentra a su suerte por que no se ha realizado nada al respecto, sólo afectaciones y no hay acciones preventivas ni de otra índole, quedando nuevamente claro que saldrá quienes se adapten a ello o quien tenga los recursos para enfrentar las enfermedades, sobre todo porque ya se  ha dicho el gasto que representa en todos los sentidos, tanto de los más comunes, hasta de los más agudos, por lo tanto será una monda al aire lo que la sociedad enfrente.

Lo anterior no omite que la situación política se detenga y, por supuesto la económica tampoco, lo que llamó poderosamente la atención es la puesta en venta de Banamex, donde City Group confirmó que es una estrategia y que no se retira del todo del mercado mexicano, pero de que causa escosor sin duda.

Lo anterior por el hecho de la inflación que se está padeciendo y donde también Estados Unidos reconoció la mañana de ayer una inflación en su espectro macro económico de 7.2 por ciento, que aunado a lo dicho de la venta de Banamex, se puede adivinar que algo hay o que algo serio se puede dar en materia económica donde seguramente no saldremos bien librados.

Así que habrá qué tomar sus precauciones, una de ellas es que quizá sea el estado quien empiece a intentar apoderarse del mercado a través del banco Bienestar que promueve el Presidente López Obrador.

Y podría tener mucha lógica, ya que a través de ese banco, el Estado ya no necesitaría de la banca privada para hacer llegar los recursos, además también iría por las remesas de los connacionales que ya implican un alto manejo de recursos, situación que los empresarios del dinero quizá alcancen a oler que ya no tendrían muchas posibilidades de jinetear el dinero y quizá para muchos podría ser una buena noticia, pero vale señalar las muchas vertientes que existen dentro del área bancaria, empezando por empleos y flujo de servicios y económicos que en una condición estatal quizá no sería tan alentadora pero que es por ahí donde se empieza y no seria nada raro observarlo. Al tiempo.

Lo cierto es que se genera mucha inestabilidad y preocupación donde seguramente estaremos atentos para observar esos cambios y esos retos. En calidad de mientras dice un dicho: cuando veas las barbas de tu vecino cortar, pon las tuyas a remojar.

Por cierto ese banco, estaría en manos del Ejército, una más para el control de dicho sector.

Y ya dije.