AMECAMECA, Méx.- Los panteones más antiguos de la zona oriente del estado de México, se ubican en el cerro del Sacromonte y en del pueblo Nonoalca del municipio de Tlalmanalco, los cuales datan de los siglos XVIII.
Según el historiador José María de la Luz Velázquez, en el Sacromonte quedaron sepultadas las familias españolas que dominaron la región, luego de la conquista española.
“Sus cuerpos quedaban en la cima del Sacromonte porque las familias españolas creían que estaban más cerca de Dios”, expresó.
Asimismo dijo que la Mitra católica del siglo XVIII, autorizó que en el Sacromonte, solamente fueran sepultados además de los españoles, los criollos, mientras que para los indígenas sus panteones quedaban a la orilla del pueblo.
“En el año de 1700, los españoles eran todavía muy rígidos y había mucha discriminación en lo que se refiere a los funerales, pese que los indígenas usaban la cima del Sacromonte para sus ceremonias”, agregó.
Por otro lado, expresó que el panteón más viejo y que también data de la época prehispánica se ubica en Tlalmanalco, donde hace muchos años se festeja al barrio de la calavera, tradición que se niega a morir.
En este lugar honraban a sus muertos con danzas en honor a la Diosa Xochipilli, así como a otras deidades precolombinas como Mitlantecutli (Dios de los Muertos) y el Zinacantecutli (Dios de la Fertilidad), pues se creía que cuando una persona moría, otra nacía.